Esta preciosidad se llama Medusa y contiene una estrella que está muriendo
Muerte y belleza. Es complicado asociar estas
dos palabras pero en el caso de Medusa no podemos decir otra cosa. La imagen
que compartimos es de Medusa, una
nebulosa que se encuentra a 1.500 millones de años luz de la Tierra y que
contiene una estrella en su fase final de vida activa, lo que ha provocado esta
impresionante instantánea.
Los responsables de la increíble imagen, la
más nítida obtenida hasta ahora de esta nebulosa, son los astrónomos del
Observatorio Europeo Austral (ESO). Para conseguirla se valieron del Very Large
Telescope en Chile.
Así de bello podría ser el final de nuestro Sol
Además de su espectacularidad, provocada por
las capas exteriores de la estrella situada en el centro de la nebulosa y que
son arrojadas al espacio, esta imagen es importante porque según los astrónomos
de ESO el final de "nuestro" Sol sería similar. Pero no estaremos en
la Tierra para verlo.
Por ahora nos tenemos
que conformar con las imágenes de Medusa, que debe su nombre lógicamente a la
extraña criatura de la mitología griega. Esta nebulosa tiene una extensión de
unos cuatro años luz, pero no es fácil poder contemplarla.
Descubierta en 1955
por el astrónomo estadounidense George O. Abell (también se conoce esta
nebulosa como Abell 21), hasta la década de los 70 no fue identificada como una
nebulosa planetaria. Ahora, la estrella situada en su centro produce eyecciones
de masa de forma intermitente, responsables de esta llamativa o colorida
apariencia.
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